Poco
he escrito en este blog sobre nuestro papa Francisco y menos sobre su obra. Prometo
hacerlo en breve.
Hoy
sólo quería comentar que mi hija que reside en California, en su reciente viaje
a la Argentina ,
me comentaba que la fascinación que ejerce Francisco en la gente es
extraordinaria.
Y,
así como se solía emparentar a nuestro país con Maradona, o con Messi, cuando
ella se presenta como argentina, le replican con una sonrisa: ¡Ah! ¡El papa!